Mañana, día 12 de marzo es el Día Mundial de Glaucoma y aprovechando os vamos a contar algunas cosas sobre esta enfermedad ocular tan común.
El glaucoma suele afectar a personas mayores de cuarenta años y suele producirse por un aumento de la presión intraocular. Este aumento de presión va afectando de manera lenta y progresiva al nervio óptico, creando una lesión irreversible. Dependiendo de cómo afecte al nervio óptico la pérdida de visión es mayor o menor, pero sin un tratamiento puede llegar a la ceguera.
Aunque existen muchos tipos de glaucomas, el más común es el glaucoma crónico de ángulo abierto. No presenta síntomas hasta que ya hemos perdido parte de la visión. Por eso, es tan importante y recomendable hacerse revisiones periódicas de la vista y de esta forma detectar de forma precoz la enfermedad. Ya que si se detecta en su fase temprana, con el tratamiento adecuando evita la pérdida de visión. Un tratamiento posible es la aplicación de gotas en los ojos dos veces al día.
No se sabe exactamente cuáles son las causas de la enfermedad del glaucoma, pero es cierto que existen algunos factores de riesgo, como la edad, diabetes, miopía o antecedentes familiares.
El glaucoma es una enfermedad crónica que necesita un tratamiento constante. Pero, hoy en día, el glaucoma es una enfermedad que podemos controlar y tratar con eficacia si se toman las precauciones debidas.